Como dice Rosa Montero… “Este bello libro, en su modestia, puede ayudar a cambiar el mundo”. ¿Hacen falta más razones?
La editorial Nube Ocho nació con vocación de cambio, de compromiso, denuncia, respeto y calidad. No evitan un solo tema por espinoso que sea. No creen que “un tabú” sea algo útil (aparte de un juego de mesa). La diversidad, la diferencia, el dolor, la soledad. La injusticia o la necesidad de paz. Todo cabe en los ojos de un niño. Todo cabe en el catálogo de esta editorial.
Uno de sus fundadores, Luis Amavisca y el genial ilustrador Guridi se han unida para alumbrar un álbum sencillo, luminoso, como una línea en un papel.
Los unos, los otros, los extraños. Y una alambrada, una frontera que divide, separa, define y reduce. Y los niños que ni entienden ni aceptan. Autores, editorial y distribuidora donan parte de sus beneficios para la defensa de los derechos humanos. Por eso este es un libro que deberías leer –y comprar-…
- Porque hay libros que cambian en el mundo, nuestro mundo, tu mundo. Hay libros que son capaces de cambiar(nos) la mirada, de hacernos ver a través de la alambrada.
- Porque los niños son los que mejor saben que no hay diferencia entre un lado y otro, que no hay extraños si de lo que se trata es de compartir el agua y el pan.
- Porque nos provoca, nos cuestiona y nos sonroja. Porque no hace discursos ni construye razonamientos. Porque no necesita de la persuasión para revelar la verdad. Porque no da argumentos ni razones. Solo una pregunta ¿Por qué son así nuestros padres?
- Porque los niños son capaces de comprender (y hacernos comprender) la realidad desnuda, sin máscaras, con la simplicidad de quien no hace tratos ni busca justificaciones. Porque la alambrada divide al mundo como parte las páginas de un libro. Y porque es necesario que alguien diga/dibuje que “se viviría mucho mejor… sin alambrada”.
Publicado en Heraldo Escolar el 25 de octubre de 2017